tres manos vacías
una cinta roja me ata
con el corazón de la montaña
me encuentro en la piedra
la neblina espesa de la mañana
cubre mi subida
Miwayama
me baño en la fresca
corriente de la montaña
debajo del agua que cae
las piedras de la montaña resuenan en mí
yo abro las manos toco la piedra
tres manos vacías en la piedra de la montaña
el sonido de tres copas llena el espacio
tres manos vacías
tres venas blancas
la fragancia del cielo cae en la piedra
el espejo desvela su secreto
la luz de la tierra
tres manos vacías
que una cinta de oro del corazón de la tierra
sea unida al linde de mis pies
que cada paso deje fluir el canto
dorado de mi corazón
a la tierra desde el linde de mis pies
como cuando la promesa encuentra
su palabra cumplidora
que un viento libre el derecho del corazón
y un espejo levante las neblinas sombrías
que la aurora del amanecer
atize su aliento en los corazones
que el eterno baile de la luz fluya en tus venas
y humedezca tus ojos con el fuego de la conciencia
Tu regalo más grande es tu despertar
y es un regalo a tierra y cielo
tres manos vacías
el viento atado abre su lazo